En el mismo sentido, queda patente que, ahora mismo, hemos vivido en una etapa en la que dominaba la atomización en los Cuerpos de Policía, por ello, nos da la sensación de que, con la publicación de la norma, todos los ayuntamientos aspiran a asociarse, por ello será importante incentivar la colaboración intermiunicipal.
Para la FSC-CCOO, es evidente que el concepto de responsabilidad social corporativa va calando junto con la percepción de las ventajas económicas que ello puede traer a los Ayuntamientos, por lo que entendemos que estas Asociaciones de Municipios, si se desarrollan bien, deben ahorrar dinero a los Ayuntamientos y, por tanto, a la ciudadanía.
No obstante y sin perjuicio de lo anteriormente expuesto, debemos adentrarnos en la realidad de la norma y, como decíamos anteriormente analizarla de manera critica, sacando a la luz aquellas cuestiones que, para nosotros, aún siguen sin respuesta, provocando más sombras que luces.
Aclarada nuestra posición inicial, debemos dejar claro que para CCOO esta era una norma necesaria y largamente demandada, especialmente por los pequeños y medianos ayuntamientos, pero lamentamos profundamente la posición endogamica y de rechazo a la incorporación de los Agentes Sociales con representación en las Administraciones Locales, que mantiene la FEMP para poder participar en la redacción y enriquecimiento de la norma que, si bien es incuestionable que desarrolla una potestad que tienen las Corporaciones Locales, no es menos cierto que la ejecución de las Asociaciones de Municipios incidirá de manera directa en las condiciones de trabajo de los trabajadores y trabajadoras que componen los Cuerpos de las Policías Locales.
Por todo lo anteriormente expuesto y, al objeto de dar respuesta a las consultas realizadas por algunas Federaciones Territoriales a la Secretaria de Política Sectorial, desde la Coordinadora Federal de Policía de la Federación de Servicios a la Ciudadanía se está preparando un informe, de cuyo resultado se dará cuenta.
