Pretenden cobrar su deuda con todos los pilares que intentaba apuntalar “el estado del bienestar de la clase trabajadora”.
El caso particular que pretendo exponer nunca llegó a fraguar dentro de nuestro Ayuntamiento, pero no por ello es menos justa su reivindicación. Me refiero al derecho de los trabajadores del Cuerpo de Policía Municipal de Madrid a Conciliar su vida Laboral y Familiar en igualdad de condiciones con el resto de funcionarios de esta administración local.
En el anterior convenio que regulaba nuestras condiciones de jornada, ya nos dejaba al margen del “MADRID COMPARTE”, con el que, entre otros, se recogía el derecho a “flexibilidad horaria” bajo determinadas condiciones.
Con el actual y polémico ACUERDO DE LA MESA GENERAL DE LOS EMPLEADOS PÚBLICOS SOBRE CONDICIONES DE TRABAJO COMUNES AL PERSONAL FUNCIONARIO Y LABORAL DEL AYUNTAMIENTO DE MADRID Y DE SUS ORGANISMOS AUTÓNOMOS PARA EL PERIODO 2008-2011, queda derogado el “Madrid Comparte”, pero reconoce en el propio documento (art.12) el derecho a la flexibilidad horaria para funcionarios con jornada ordinaria en turno de mañana y que no presten atención al público.
Con ello deja fuera a todos los trabajadores con horarios especiales y los remite a sus propios ámbitos de negociación colectiva, esto es a sus mesas de negociación respectivas donde el Ayuntamiento ha recurrido al decretazo para regular sus jornadas laborales (actualmente en Policía y Agentes de Movilidad).
Con este panorama interno poco prometedor debemos observar cómo se está resolviendo la cuestión en otros cuerpos de policía local e incluso autonómico, y el resultado es “desolador”:
martes 19 de octubre de 2010
“La reforma de la Ley de Policías de Navarra rompe con un proyecto de futuro para sus Policías y se acerca a la vieja policía del régimen".
Giremos nuestra vista hacia los trabajadores que tienen profundamente limitados sus derechos sindicales por su condición de militares y que pelean denodadamente por salir de esa injusta situación:
La Delegación del Gobierno en Madrid prohibe la manifestación convocada para el sábado 18 de Septiembre en la capital de España por las asociaciones mayoritarias de la Guardia Civil en demanda de mejoras laborales y profesionales.
Posteriormente, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM) estimó el recurso de la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC) contra la decisión de la Delegación del Gobierno en Madrid de prohibir la manifestación convocada para ese día y autorizó su celebración.
Semejante intento ha puesto en alerta a los expertos en seguridad del Gobierno de la Nación (en manos del PSOE, no lo olvidemos) que no están dispuestos a regular el horario ni a pagar ni un euro más a los que tienen la difícil misión de velar por nuestra seguridad en el ámbito rural del estado español.
¿Alguien discute que el horario de un soldado depende de los peligros de cada momento? Nadie. Pues ése es el horario de un Guardia Civil. A un policía no se le puede pedir más horas que las pactadas sindicalmente o reglamentariamente. A un guardia civil se le pueden pedir todas las horas que una amenaza genere a la ciudadanía. (sic)
Esta ofensiva brutal e injusta contra los diferentes cuerpos de Seguridad está siendo contestada por los responsables de CCOO (presentes en la citada manifestación de Guardias Civiles) y debe ser apoyada sin reservas cuando próximamente seamos llamados a una gran movilización de Policías Locales de todo el Estado Español en Madrid.
Federico Sólvez Liria
Coordinador de Policía Municipal Ayto. de Madrid